Ayer tuvimos una auténtica visita de lujo, recibimos la presentación en directo del disco Hard Candy de Madonna en el circuito de Cheste.Su música realmente no me ha interesado nunca, pero no quería dejar pasar la oportunidad de ver un gran espectáculo, pero sobre todo de ver en vivo a una parte importante de la historia de la música. A mi me ha tirado siempre el Rock. El Rock además de música, es una actitud. Una manera de enfrentarse a la vida con inconformismo, con rebeldía ante lo que no nos parece bien, de provocación ante aquellos que pretenden que su moral es la única buena y encima pretenden imponerla al resto del mundo....Madonna es un estandarte de esta actitud,una provocadora contra el puritanismo y la rígida moral cristiana, una abanderada de la defensa de una manera de entender la sexualidad de un modo abierto,libre, sin prejuicios, sin cargas morales y sin clichés. Por eso tengo que reconocer que la admiro, siempre me han gustado los rebeldes, los provocadores.
Anoche caí rendido además ante la potencia de su Show.Visualmente era un auténtico regalo para los ojos lleno de color, cuerpos de vértigo, pantallas gigantes, láseres y esos ojos verdes con una mirada tan profunda que intimidan. Ella, a sus 50 años está llena de energía y no ha perdido nada de la belleza de su espectacular cuerpo, de su rostro travieso, ni de esa actitud y potencia cuando reina encima del escenario. En cada canción el escenario se transforma y se mantiene un ritmo constante durante todo el espectáculo,sin apenas altibajos,quieres más y más y tienes ganas de que esa fiesta para los sentidos, de luz, música alegre y de calidad, coreografías, proyecciones...etc, que se está viviendo sobre el escenario no se termine. Pero todo lo bueno tiene un final y este llegó exactamente a las dos horas de haber comenzado.
viernes, 19 de septiembre de 2008
LA NIÑA REBELDE
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