El fin de semana pasado, un amigo me pidió que le acompañase a visitar el castillo de Moya en la provincia de Cuenca. El castillo está en un estado bastante ruinoso, pero no por ello ha perdido su majestuosidad. Domina una amplia planicie desde lo alto de un risco. Aún están en pie los restos de un monasterio y de una ciudadela amurallada. Se dice que en su época de esplendor la ciudad contaba con siete iglesias y viendo las dimensiones y grandeza del conjunto, no cabe duda de que fué uno de los enclaves más importantes de la mancha medieval. Grabé estas imágenes que espero que transmitan las mismas sensaciones que sentí yo ante estas maravillosas ruinas antes de una bellísima tormenta.
miércoles, 21 de mayo de 2008
EL CASTILLO DE MOYA
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