lunes, 16 de junio de 2008

EL FIN DE UN CICLO

Hace solo unos minutos que acabo de recoger mis cosas de una casa en la que he vivido tres años. Es una sensación extraña, pues en esa casa he compartido muchos momentos con una persona y una perrita a la que quiero mucho. Ha sido triste, ver como desaparecen tus cosas de un espacio que has creado desde la nada y que ahora se ha evaporado. Al ver por primera vez las paredes vacías de la que iba a ser mi casa tuve la sensación de que se abría un ciclo nuevo ante mí. Hoy al ver de nuevo las habitaciones desiertas se ha cerrado definitivamente este capítulo de mi vida que empezó a cerrarse hace más o menos un año. Creo que muchas veces nos cuesta cerrar capítulos de la historia de nuestras vidas. A mi me ha costado cerrar este, mas que nada por el engorro de una mudanza. Con el acto simbólico de recoger los testigos de mi existencia en ese espacio ha llegado el fin de un ciclo para mi. Aunque ha sido duro, me alegro de haberlo hecho por fin.
De nuevo ante un fracaso de un proyecto en la vida. Me gustaría pensar que los fracasos sirven para que los proyectos futuros salgan mejor, que son necesarios para que prosperemos como personas, que es necesario equivocarse como una parte fundamental del proceso de crecimiento del ser humano, que aprendemos y nos perfeccionamos por el método de prueba y error. Al cerrar por última vez la cerradura del piso se ha cerrado también un compartimento lleno de alegrías y penas en mi baúl de los recuerdos. Los recuerdos son el bien más preciado de las personas, verdaderos tesoros. Estos como tantos otros, unos dulces otros amargos, los pienso guardar a buen recaudo en el cofre del tesoro de mi memoria.Pese a ser algo triste, quiero quedarme con lo bueno de la experiencia de compartir unos años de mi vida con esa persona y con la pequeña perra. Darles las gracias por todo lo vivido y sobre todo dar gracias a quien corresponda el fin de este proceso haya tenido una transición tranquila, pacífica como corresponde a personas civilizadas y desearles que les vaya mejor que hasta ahora.
Siento la vida como una sucesión de momentos, unos vienen y otros se van. Se cierran y abren etapas, triunfan y fracasan proyectos. Aunque a veces jode y los pasas mal me alegro de haber tenido muchos fracasos porque estos seguro que han contribuido al éxito de mis aciertos. Espero, para acabar este post, que esta experiencia me ayude a hacerlo mejor mi nuevo proyecto.

domingo, 8 de junio de 2008

LA CATEDRAL PAGANA


Este vídeo es un ensayo, una prueba de lo que espero sea un proyecto gráfico de mayor envergadura sobre la ciudad de valencia.
En todo caso es mi visión particular de este maravilloso edificio. Para el que no lo conozca, la lonja de la seda es un edificio construido en los últimos años de la edad media, cuando el estilo gótico había adquirido su madurez. La vanguardia mundial de los artistas en el corte de la piedra trabajaban en la ciudad. En ese momento valencia era un próspero puerto del mediterráneo y gozaba de un poderío económico importante. Este edificio servía para hacer transacciones comerciales y también albergaba la sede del consolat del mar. Es un verdadero templo pagano que parece dedicado al único y verdadero dios al que adoran por igual todos los habitantes del planeta sin distinción de raza, condición y credo, me refiero como no al dinero. Al dinero obtenido por la prosperidad de los negocios que allí se cerraban.
La belleza de su salón columnario, de sus pórticos ornamentados y de los amplios ventanales bordados con elementos del gótico flamígero, así como sus vidrieras, nada tienen que envidiar a los templos cristianos más bellos del medievo. Los arquitectos y orfebres que hicieron posible este poema escrito en piedra, tienen un puesto por derecho en las páginas de la historia del arte, aunque los nombres de muchos de ellos se hayan perdido para siempre en el olvido. Pues entonces, al revés que ahora, la obra estaba por encima del artista. La perfección en el corte de cada una de las piezas de este gran puzle de piedra es asombrosa. Pero a mí personalmente lo que me vuelve loco son los cientos de gárgolas y esculturas que nos hablan de los vicios y pecados de la humanidad. No deja de sorprenderme, no solo la belleza y perfección de las mismas, sino que engalanen con orgullo este edificio que nació en el seno de una sociedad profundamente religiosa, pues muchas de ellas son profundamente irreverentes. Parece una gran fiesta pagana, llena de seres demoniacos y de figuras en poses casi pornográficas y enormemente provocadoras. No falta la virgen protectora que nos mantendrá alejados de todas estas provocaciones. Pero viendo la enorme belleza de estas figuras "malignas", me resisto a creer que quien las creó no sentía una cierta atracción hacia lo maligno, hacia lo dionisiaco. Se me antoja una especie de liberación de todas las represiones y prejuicios de la época a través de hermosos gritos de piedra. Que a través de sus cinceles y buriles dieron rienda suelta a aquello que la moral cristiana veía con malos ojos, pero que es imposible reprimir, como los pecados de la carne . Solo puedo quitarme el sombrero y maravillarme ante los artistas que crearon semejante maravilla y ante la sociedad que permitió y financió su construcción.

viernes, 6 de junio de 2008

SUEÑOS CRUZADOS EN GIBRALTAR


El fin de semana pasado fuí a recoger a mi hermano a su trabajo. Trabaja como educador social en un centro de acogida de menores inmigrantes.La mayoría de ellos son de marruecos, país del que estoy profundamente enamorado desde que lo conocí hace ya unos años. Para mi es un país con el que sueño despierto muchísimas veces.Viajo con la imaginación muy a menudo allí. Recorro las dunas de sus desiertos, sus montañas del alto atlas, me pierdo en sus medinas, disfruto de su gastronomía y respiro la brisa del atlántico en Asilah.En definitiva, para mí es el lugar en el mundo donde me escaparía para huír de mi mundo cotidiano.Me conforta saber que hay gente en el mundo qu vive la vida según otros preceptos y que entiende la vida de otra manera que en la podrida sociedad occidental. En definitiva, es un faro que alumbra mis sueños de escapar del entorno que a veces me oprime. Pero soy consciente de que ese marruecos ídílico de mi imaginación no existe, que es solo una utopía, pero una utopía necesaria.
La gran paradoja de todo esto es que estoy seguro de que la misma fuerza magnética que dirige mis sueños hacia el sur, la han sentido esos menores que viven en el centro, en dirección norte. Seguro que del mismo modo que la luz de la luna llena sobre la medina de chaouen ilumina mis sueños; los neones de nuestros bares de moda, el brillo de los coches caros y los focos de los escaparates de ropas de marca, iluminan los sueños de muchos marroquíes. A mi me atraé el sur porque es donde en mi imaginación puedo escapar de mi cotidianidad que no me acaba de complacer y en marruecos ven en nuestra manera de vivir un mundo de oportunidades y prosperidad que no les ofrece el marruecos real. Pero cuando llegan aquí se dan cuenta de que ese sueño occidental tampoco es real, que es utòpico como mis fantasías africanas. Pero ambos necesitamos seguir soñando, que esas utopías existan en nuestras cabezas para poder vivir.
El lugar mágico donde se cruzan esos sueños es el mítico estrecho de gibraltar. Un océano de tan solo 14 kilómetros. Una frontera que separa dos culturas, dos maneras de entender la vida, dos realidades sociales. Si en el momento de tu nacimiento la moneda caé de cara y naces en el lado norte, tienes más posibilidades de una vida más fácil en el primer mundo. Si caé cruz y naces en el tercer mundo, lo tienes jodido, pues es bien sabido que el viaje en sentido África-Tarifa es más dificil.